Nuevo medicamento reduce casi a la mitad el riesgo de progresión de un tipo de cáncer de mama que, a la fecha, no contaba con un tratamiento específico
Se denomina talazoparib, fue aprobado por la ANMAT y ya está disponible en nuestro país. Es un tratamiento para un subtipo específico de cáncer de mama: gBRCA+ y HER2.Un estudio clínico denominado EMBRACA, demostró en las pacientes que recibieron esta molécula una sobrevida libre de progresión de 8.6 meses vs. 5.6 meses que tuvieron las pacientes que se trataron con quimioterapia estándar, lo que representa un 46% en la reducción del riesgo de progresión de la enfermedad.
Recientemente, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó una nueva terapia por vía oral para el tratamiento de un subtipo específico de cáncer de mama. Esta nueva droga que ya se encuentra disponible en nuestro país y se denomina talazoparib, demostró reducir en un 46% el riesgo de progresión de enfermedad: la sobrevida libre de progresión fue de 8,6 meses, vs. 5,6 en las pacientes que recibieron quimioterapia estándari.
Talazoparib está indicada para pacientes con cáncer de mama localmente avanzado o metastásico, HER2 negativo y que presentan mutación del gen BRCA, el cual se determina mediante un test genético. Es un tipo de tumor que, generalmente, se presenta a edades más tempranas que el resto de los tumores de mama y en mujeres con historial familiar o propio de tumores de mama/ovario[ii].
Avalan la eficacia de esta nueva droga los resultados del Estudio Pivotal EMBRACAi, un estudio fase III que involucró a 431 pacientes que presentaban este tipo de enfermedad (gBRCA+, HER2-). En la investigación, se vio que más de 6 de cada 10 pacientes (62,6%) consiguieron respuesta positiva gracias a esta nueva molécula; mientras que en el grupo que recibió quimioterapia, los resultados fueron del 27,2%.
En 2018, se registraron 21.558 nuevos casos de cáncer de mama incluyendo todos los subtipos de esta enfermedad, lo que representa 59 nuevos diagnósticos por día[iii]. Asimismo, en 2017 murieron en nuestro país 6.114 personas por esta enfermedad[iv], lo que demuestra la necesidad de desarrollos de nuevas terapias como ésta, que brinden nuevas alternativas a las pacientes.
“Hasta ahora, este grupo de pacientes con cáncer de mama no contaba con una alternativa que presentara niveles de eficacia altos. Por este motivo, la aprobación de talazoparib representa una noticia muy positiva para ellas, ya que ahora tienen más herramientas para mejorar su calidad de vida, al aumentar el tiempo libre de progresión. El beneficio que esto genera para las pacientes es considerable: tanto por la sobrevida libre de progresión como por la posibilidad de estar saludables durante más tiempo, a la espera que desde la investigación se desarrollen nuevos fármacos con los que se puedan beneficiar”, detalló la Dra. Valeria Cáceres, Jefa del Departamento de Oncología Clínica del Instituto Ángel Roffo-UBA.
Una particularidad del estudio es que incluyó a pacientes previamente tratadas, con antecedentes de metástasis cerebral o con un tipo de enfermedad más agresiva (con receptor de hormonas negativo), lo que muestra que talazoparib representa una alternativa esperanzadora incluso en cuadros muy comprometidos.
Para la Sra. Marta Mattiussi, Presidenta de MACMA (Movimiento Ayuda Cáncer de Mama), “siempre es una buena noticia contar con más y mejores medicamentos disponibles y desde nuestra institución celebramos la llegada de toda innovación que nos permita mejorar el pronóstico de la terapia y contribuir a una mejor calidad de vida de las pacientes”.
Si bien la presencia de mutaciones de BRCA 1 y 2 en pacientes con cáncer de mama avanzado no empeora el pronóstico en cuanto a sobrevida con respecto a pacientes que no presentan mutaciones de los mismos genes, las pacientes con este diagnóstico tienen la posibilidad de acceder a un tratamiento eficaz y distinto de la habitual quimioterapia.
“Su forma de administración, de una toma oral diaria, conforma un paso adelante para la calidad de vida de quienes padecen esta condición. Talazoparib es generalmente bien tolerado, con mínima toxicidad no hematológica y pocos eventos adversos que pudieran determinar la discontinuación del tratamiento. Además, las pacientes podrán evitar la incomodidad de tener que recibir terapias que deban ser administradas por vía intravenosa y por sobre todo minimizando las dificultades que se suman cuando los tratamientos impliquen la necesidad de ser recibidos exclusivamente en centros de salud. Todo avance que implique una mejora en la calidad de vida, incluyendo la facilidad en la administración de un fármaco, es bienvenido”, expresó el Dr. Guillermo Lerzo, Jefe Unidad Oncología Clínica del Hospital de Oncología María Curie de la Ciudad de Bs. As.
Los efectos adversos más comunes fueron los hematológicos: anemia (39% de grado significativo), neutropenia (21% de grado significativo) y trombocitopenia (14% de grado significativo). Otros efectos secundarios fueron: caída de cabello parcial y no total (25,2%), cansancio (50% de las pacientes, pero sólo el 2% en grado relevante), y relacionados con el aparato digestivo (náuseas, vómitos, diarrea) en menos de una cuarta parte de las pacientes[v].
“El conocimiento que la ciencia tiene acerca del cáncer se ha ido profundizando notablemente en las últimas décadas, a tal punto que en este tipo de tumor hoy no hablamos de ‘cáncer de mama’ en general, sino que existen múltiples subtipos de esta condición”, aclaró el Dr. Lerzo. “Allí radica la importancia de conocer qué tipo de enfermedad padece cada paciente, con nombre y apellido de la afección, para de esta manera poder indicar el mejor tratamiento disponible”, concluyó la Dra. Cáceres.