La Sociedad Argentina de Pediatría se preocupa por la desaparición de menores en Argentina
En el mes de las infancias, la SAP cuestionó que muchos menores estarán ausentes de sus hogares en el país.
La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) expresó su profunda preocupación ante la alarmante situación por la desaparición de niños, niñas y adolescentes (NNyA) en nuestro país. En vísperas del día de las infancias, muchos menores argentinos estarán ausentes de sus hogares.
El Registro Nacional de Información de Personas Menores Extraviadas (RNIPME), creado para centralizar, organizar y entrecruzar la información de todo el país sobre menores de paradero desconocido, mostró que las cifras de denuncias están en ascenso: en 2021 se registraron 726, el 2022 fueron 1935 y en 2023 se indicaron 3115.
De las denuncias efectuadas en 2023, 1905 NNyA fueron hallados y 1210 solicitudes de búsqueda aún continuaban vigentes al momento de la publicación del reporte. La mayoría fueron niñas adolescentes entre 13 y 17 años (67%).
Por su parte, el Registro de publicación y búsqueda de chicos perdidos del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes Ciudad de Buenos Aires, en su reporte 2021, informó la búsqueda de 228 NNyA. La organización no gubernamental Missing Children (Chicos Perdidos de Argentina) actualmente en su página web publica las fotos de 74 niños aún perdidos y 42, ya mayores de edad, en los que se continúa su búsqueda.
La venta, trata de personas y explotación laboral están presentes en este escenario. Así mismo, muchos de estos niños escapan de sus hogares por situaciones de violencia familiar. Desde el momento en que el niño o adolescente desaparece o abandona su domicilio, es una víctima. Invertir esta situación, victimizando a la familia y/o condenando a los NNyA, simplifica un fenómeno complejo que obedece a múltiples causales o reduce el origen del problema a una supuesta rebeldía, especialmente si se trata de un adolescente. Por otro lado, las familias de los niños desaparecidos viven una realidad de dolor e incertidumbre constante, que afecta profundamente su salud mental y emocional.
La prevención y el tratamiento respetuoso de este tipo de casos, sin exponer la intimidad de los NNyA involucrados es fundamental, debido a que pueden subyacer incluso situaciones graves (como abuso o violencia familiar), que requieren un abordaje adecuado por parte de profesionales especializados y las agencias públicas competentes en la materia.
La SAP reiteró su compromiso con la preservación de los derechos de la niñez y adolescencia, y llama a todos los sectores a trabajar juntos para poner fin a esta tragedia. No se puede ni se debe permanecer indiferente ante la desaparición de un niño o un adolescente. Es una situación social inadmisible. La sociedad toda debe actuar con responsabilidad de manera decidida y unívoca para garantizar la seguridad y bienestar de los NNyA. Es responsabilidad de las autoridades locales, provinciales y del Estado en su totalidad, encontrar a todo NNyA con paradero desconocido.
La SAP instó al fortalecimiento de las investigaciones judiciales y a las fuerzas de seguridad para que se efectúe un seguimiento de las instancias jurídicas e investigativas de los casos de niños extraviados aún sin resolución, a desarrollar un trabajo en red con instituciones públicas y privadas relacionadas con el tema, a sensibilizar, informar y concientizar a la sociedad sobre la gravedad de esta problemática y a difundir las fotos de los menores aún ausentes de sus hogares a través de los medios de comunicación. El momento es ahora.