Cuatro frutas que ayudan a disminuir la presión arterial de forma natural
La alimentación es una de las claves para evitar el desarrollo de esta patología, cuyo punto de partida es reducir la ingesta de sodio y aumentar el consumo de potasio.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo hay un promedio de 1.280 millones de adultos, de entre 30 y 79 años, que padecen hipertensión arterial. Esta patología es una de las principales causas de muerte prematura y lo alarmante es que nada más que uno de cada cinco pacientes tiene controlado el cuadro.
Un informe de la Universidad de Harvard explica que es una enfermedad que afecta a las arterias del cuerpo cuando la sangre ejerce demasiada presión sobre ellas. Específicamente la presión sanguínea está compuesta de dos partes: una se denomina “sistólica” y tiene que ver con la presión que el corazón genera cuando bombea sangre al resto del cuerpo; la otra se llama “diastólica” y se refiere a la presión de los vasos sanguíneos entre latidos. La misma se mide en milímetros de mercurio (mm Hg) y se divide en cuatro categorías generales:
- Normal: Menos de 120/80 mm Hg.
- Elevada: 120-129 mm Hg sistólica y menos de 80 mm Hg diastólica.
- Hipertensión etapa 1: 130-139 mm Hg sistólica o 80-89 mm Hg diastólica.
- Hipertensión etapa 2: 140 mm Hg o más sistólica o 90 mm Hg o más diastólica.
Lo complejo de esta patología es que suele ser silenciosa: no presenta síntomas evidentes hasta que alcanza un estadío avanzado. En estos casos, aclaran desde la Universidad de Harvard, puede aparecer dolor de cabeza, fuertes latidos del corazón, mareos e incluso que la visión se torne borrosa.
El diagnóstico temprano es fundamental, porque de lo contrario puede dañar algunos órganos tales como el cerebro, los ojos, el corazón, los riñones y las arterias alrededor del organismo. Esto aumenta las probabilidades de sufrir un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Si bien algunas de sus causas son producto de factores de riesgo no modificables, como la genética o la edad, también se puede desencadenar a partir de cuestiones relacionadas con los malos hábitos tales como la alimentación, el sedentarismo y el tabaquismo.
Dietary Approaches to Stop Hypertension
La dieta de una persona hipertensa o con riesgo a padecerlo debería basarse en lo que se conoce como DASH (Dietary Approaches to Stop Hypertension, por sus siglas en inglés), creada en la década del 90 y enfocada en reducir la ingesta de sodio y aumentar la de potasio.
Desde la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos recomiendan que un hombre adulto sano consuma por día aproximadamente 3,4 gramos de potasio y una mujer de las mismas características, 2,5 gramos.
Bajo esta premisa, la dieta DASH se basa en el consumo de frutas, verduras, lácteos descremados, proteínas magras provenientes de aves y pescados con Omega 3, un ácido graso que actúa como cardioprotector y frutos secos. La cantidad de cada alimento dependerá de los requerimientos nutricionales y las necesidades de cada persona.
En contrapartida, lo ideal es que quede vedado el alcohol, las carnes rojas porque contienen grasas saturadas, las bebidas azucaradas y los productos ultraprocesados tales como los snacks, los embutidos, enlatados, las conservas, las sopas preparadas y los aderezos.
Cuatro frutas que reducen la hipertensión arterial
Si bien no hay restricción en la ingesta de frutas y verduras, hay algunas que se destacan por sobre las demás.
- Banana: elegir las que presentan cáscara amarilla con pequeños puntos marrones, ya que están en su punto justo de maduración. Se conoce por ser una importante fuente de potasio y aloja una variedad de nutrientes que le aportan beneficios al organismo. Una pieza (100 gramos) contiene aproximadamente 100 calorías y 25% de hidratos de carbono. Casi no posee grasas, proteínas ni colesterol.
- Tomate: es una planta comestible que contiene fitoquímicos, compuestos naturales con efectos beneficiosos para la salud. No sólo reducen la hipertensión arterial, también disminuyen las chances de desarrollar otras enfermedades crónicas tales como las neurodegenerativas y las cardiovasculares. Es importante comerlo sin sal agregada.
- Manzana: es un alimento noble, completo e ideal para mantener en equilibrio las funciones vitales del organismo. Su consumo no tiene restricciones y es muy bien tolerada por el cuerpo. Entre un 80 y 85% de su composición es líquido, por lo que su consumo nos aporta una excelente hidratación. Se recomienda comerla cruda y fresca, incluso con cáscara para aprovechar los beneficios de la pectina, una fibra natural que se encuentra allí y que absorbe el excedente de agua y las toxinas.
- Naranja: se caracteriza por ser fuente de vitamina C, un micronutriente esencial que colabora en el correcto funcionamiento del sistema inmunológico. Unos 100 gramos de este alimento contiene aproximadamente 181 miligramos de potasio. Lo ideal es que se la consuma entera, en gajos o en ensaladas. Cuando se hacen jugos o batidos su estructura se rompe y, en consecuencia, pierde sus nutrientes.
La alimentación juega un rol clave en la vida de las personas, ya que potencia o disminuye la calidad de vida. Son infinitas las opciones que existen para comer de manera saludable, natural y a la vez rico. El secreto pasa por la creatividad, por innovar y animarse a probar.
